El sistema educativo en general (instituciones, directivos, profesores y comunidad educativa en general), está en la necesidad de reevaluar sus políticas educativas generando cambios sustanciales hacia una educación que reconozca, valore y promueva la inclusión en todos los ámbitos.
Para lograrlo, es fundamental que:
1. La educación comprenda que todos aprendemos de forma diferente: La homogenización (considerar a todos los estudiantes como personas iguales) de los sistemas educativos, desconoce la individualidad y las diferencias en el aprendizaje que posee cada persona; mientras se pretenda continuar enseñando de la misma forma para todo el grupo de estudiantes, se continuará:
Desconociendo las habilidades de cada persona.
Promoviendo prácticas educativas poco significativas.
Aumentando el fracaso escolar y la deserción.
Negando nuevas oportunidades por medio de las cuales cada estudiante logre los objetivos propuestos.
2. La comunidad educativa debe estar abierta a la inclusión educativa: Directivos, docentes, padres y todas las personas que hacen parte de la institución, merecen darse la oportunidad de enriquecerse con la inclusión educativa:
Abriendo espacios de formación para todas las personas sin importar su tipo de desarrollo.
Dándose la oportunidad de aprender de la diferencia.
Reconociendo las potencialidades de cada estudiante.
Creciendo como una verdadera comunidad en la que cada uno es parte vital de esta.
3. Directivos y profesores necesitan acceder a nuevas metodologías educativas: El mundo es cambiante y por lo tanto los seres humanos también, por esta razón la educación no debe desconocer los avances tecnológicos, científicos y sociales que enriquecen y apoyan las prácticas educativas; planteando nuevas formas de enseñar por medio de las que sus estudiantes y padres comprendan:
La importancia de la educación para la vida: El estudiante comprenda y reconozca para qué le sirve en su vida cada uno de los temas que abarca en el sistema educativo.
Lo fundamental que es ser competente: No es solo aprender conocimientos, es aprender a aplicarlos efectivamente, a reaprender y a construir en comunidad nuevos saberes.
La riqueza que aporta el acceso a las nuevas tecnologías: Acercando al estudiante a lo que realmente le interesa, por medio de los mecanismos que usa a diario (internet, redes sociales, videos); promoviendo el interés de la persona y guiándole a aprender de forma fácil y dinámica.
4. Se reconozca que todos los lugares son espacios en los que se aprende: El salón de clase no es el lugar exclusivo para la generación del conocimiento, en cualquier lugar la persona conoce y aprende experimentando y haciendo. El patio, el salón múltiple, la biblioteca, el parque, la cafetería, la casa, los espacios abiertos ofrecen infinidad de enseñanzas que el profesor debe aprovechar para enseñar, de forma cotidiana y práctica, guiando a su estudiante en el descubrimiento de nuevos conocimientos.
5. Las artes y el deporte deben ser espacios fundamentales para el aprendizaje: La música, el teatro, la danza, las artes plásticas y las diferentes disciplinas deportivas estimulan el cerebro y por consiguiente la creatividad en las personas; desde los primeros años de vida el niño necesita estar en contacto con el arte y el deporte, estimulando sus habilidades cerebrales y físicas, fundamentales para aprender con más facilidad.
Las puertas de la educación deben estar abiertas para todos sin importar edad,
condición social, económica o física; todos los seres humanos tiene el derecho
de estudiar, de aprender y de formarse para la vida; mientras en la educación
hayan barreras para las personas, continuaremos con sistemas educativos sin
equidad, sin transformación y completamente excluyentes.